Al estar creciendo tan rápido, necesitábamos un espacio que se adaptase a las necesidades de nuestros empleados y en el que nos pudiésemos instalar pronto. Freddie entendió nuestras necesidades a la perfección y no nos puso pegas con nada. Encontramos la oficina que queríamos en la primera selección. Después, fuimos a verla y firmamos el contrato ese mismo día.